Con saldo positivo
La lucha por el Edificio impulsó al debate y a la
participación activa a todo un sector de estudiantes de RRTT. El que nos haya movilizado
así, se explica por las condiciones en las que irrumpió.
Durante el 1º y 2º cuatrimestre, nos esforzamos por hacer
ver el rol de la gestión de carrera que encabeza Stella Escobar, la más débil
de toda la facultad, ya que asumió con el 65% de los votos de estudiantes en
contra. Es la gestión que administra la miseria adaptándose a ella y exponiéndonos
a sus consecuencias: cupos expulsivos, cursos hacinados, falta de cátedras
paralelas, docentes precarizados o directamente sin sueldo, etc. Al comprobar
empíricamente que las autoridades no solucionaban nuestros problemas, nos
pusimos la facultad al hombro (junto a cientos de compañeros) y obtuvimos $20 millones para comenzar de
inmediato con el 3º pliego del Edificio Único (mudándonos lo antes posible) y
presupuesto para las refacciones de nuestra sede.
Contra viento y marea
Todo esto fue contra la presión que las autoridades
ejercieron para que los docentes no dieran clases y contra el traslado de sus
planteos a través de la agrupación UES.
Durante todo el conflicto, esta agrupación de funcionarios rentados
publicó mentiras e intentó impedir que sesionen las asambleas en las
que siempre se vio ampliamente superada en número. No pudieron, porque
ni con engaños ni pintando un aula al año (con presupuesto de la
facultad) logran lavarle la cara a la gestión que integran, la misma
que convive con vidrios que se caen.
Luego de tanto esfuerzo por quebrarnos,
no soportan nuestra victoria y han salido con un cuento chino para explicar que
todo fue en vano. En una ofensiva más dura, varias cátedras han adelantado sus
parciales e incluso evalúan contenidos nunca dictados, como represalia tanto
para quienes defendimos la toma como para quienes “no se organizaron con palos
para levantarla” (sic). Que
la UES cierre la boca ante esto demuestra que buscaban defender a las
autoridades y que, frente a ellos, estábamos los estudiantes que
defendemos la cursada y las condiciones edilicias.
Fortalecer nuestro
sindicato para ganar
Ante estos ataques y anticipando los que vendrán, debemos
fortalecer nuestra herramienta gremial, el Centro de Estudiantes. Sólo así
defenderemos nuestro derecho a estudiar, superando el bloqueo que las
autoridades imponen desde la junta (donde nuestros proyectos, como el de
anulación de la ley de cupos, ni siquiera son tratados).
La actual conducción (TREN-Mella) estuvo ausente todo el año,
relegando nuestros problemas al último orejón del tarro. No es de extrañar, en la
última elección salieron últimos en RRTT, porque nada tienen para ofrecernos y
porque cogestionan otras carreras, recortando materias
contra de los estudiantes. Para peor, hoy se presentan divididos.
Del 23 al 26 votemos masivamente, apostando al cambio y la
renovación, que los compañeros de la Agrupación 1º de Mayo (oposición
estudiantil en la Junta de RRTT) representamos en el frente de izquierda La Comuna.
